Rocky

“…Cuando suene la campana sabré que no soy un vago más de la cuadra…”

ADVERTENCIA: por esta única ocasión no me contuve a la hora de cacarear la siguiente película, por lo que tal vez prefieran verla antes de leer el siguiente artículo.

Introduces a un personaje carente de recursos y talentos más allá del de saber golpear, lo rodeas de escenarios pobres y personajes que lo subestiman, lo relacionas con el mundo pugilístico en el peldaño más profundo del deporte y le das una oportunidad única en la vida de contender por el título, una voluntad de acero y la increíble necesidad de ganarse el respeto de los que lo rodean y más importante aún el auto respeto, junto con el hecho de saber que no era un vago más de la cuadra, y resultas con una de las mejores producciones de drama deportivo de todos los tiempos.

Rocky de 1976 es una película dirigida por John G. Avildsen y escrita por Sylvester Stallon, que relata la vida de un boxeador que a pasado por su mejor época y comienza a enfrentar el declive de su carrera percatándose que en realidad nunca logro nada importante con ella, atorado en un empleo de cobrador de un prestamista en los muelles Rocky se percata de que su vida no lleva el rumbo que él esperaba.

Sin embargo por una mera casualidad el campeón actual Apollo Creed decide darle una oportunidad de contender por el título de los pesos pesados, decisión que transformará la vida de Rocky.

La narrativa de la película es muy buena, las actuaciones aunque trabajan sobre personajes básicos, son sobresalientes, dos detalles de la narrativa en general son muy destacados, la fotografía junto con el diseño de arte, la ambientación y la musicalización, trabajaron en conjunto para construir más de un momento clásico de la cinematografía a lo largo del filme.

Pero es el guión el que sin lugar a dudas se convirtió en la pieza clave de esta extraordinaria producción, adentrándonos un poco más en lo que es la trama, Rocky es un personaje lleno de voluntad que se desarrolla en un ambiente de fracaso hasta el momento en el que le dan la oportunidad de darle un sentido a su vida, sin embargo la película toma mucho tiempo para desarrollar al personaje, esto porque la trama no se basa en un hecho deportivo como podría ser la pelea, sino que gira en torno a este y se desarrolla más bien en base al respeto, y es precisamente el guión a través de los diálogos el que nos permite apreciar el filme de esta forma.

“No sé a quién estoy engañando, no hay forma de que le gane, ni siquiera estoy en su misma liga” -Rocky la noche previa a la pelea.

Con este dialogo Rocky expresa su pesimismo y su miedo por lo que él considera será el peor de sus fracasos, además de que evita nos sintamos defraudaos con lo que será el desenlace de la película.

“Nadie a aguantado hasta el 15vo contra Apollo, si llego ahí y me mantengo de pie cuando suene la campana sabré que no era un vago más de la cuadra”-Rocky la noche previa al encuentro

Increíblemente justo después de ver un momento de flaqueza el personaje nos sorprende con una línea en la que más que expresar un conformismo, expresa un deseo por demostrarse a si mismo y a todos los demás que moriría antes de fallar.

“¡Quédate abajo chico!, ¡quédate abajo!” –Mickey al momento de que Rocky es derribado en el penúltimo raund

“Si detienes la pelea, te mato” – Rocky antes de salir al último Round

Apenas duran unos instantes estas líneas y aunque los personajes están en primer cuadro el público los opaca, sin embargo son momentos claves en los que vemos que Rocky se ha ganado primero el respeto de su entrenador que ha visto como se a entregado de lleno, e inmediatamente después la respuesta de Rocky exclamando que a él le faltaba un poco más, un último round para demostrarse de que es capaz.

Es por esta misma razón que a pesar del desenlace el personaje se siente victorioso y nadie sale defraudado de la proyección.

Esto es apenas un pequeño ejemplo de lo bien que esta construido un guión en el que los diálogos fluyen en torno a una misma idea y un mensaje trascendental que logró construir a final de cuentas uno de los clásicos y de las obligadas en la industria del cine.

No encuentro una mejor forma para desarrollar el mensaje que Rocky presenta, en el que una persona tiene que ganar el respeto a base de coraje, valor y golpes, todo dentro de la fuerza del mundo del boxeo.

Por Daniel